SCREAMIN’ CHEETAH WHEELES Y THE STEEPWATER BAND

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Doble sesión de rock and roll de calidad con raíces americanas

Redactor y fotógrafo: Chema Pérez

Sala La Paqui (Madrid) 30-noviembre-2023

Es de agradecer que todavía se programen sesiones dobles de rock and roll del nivel que pudimos disfrutar ayer. The Steepwater Band actuó en primer lugar por un tema de antigüedad de grupo más que nada, pero cualquiera de los dos podría haber dado un gran concierto sin necesidad de actuar con otra banda, pero si te dan un dos por uno a un buen precio, hay que aprovecharlo.

Y así fue como La Paqui (antes But) tuvo un lleno absoluto para poder disfrutar de las dos bandas. Y es que la vuelta de Screamin’ Cheetah Wheeles después de diecinueve años sin juntarse era cita obligada.

Puntualmente abrieron The Steepwater Band, acostumbrados a venir a España, ahora tras la marcha del bajista Tod Bowers, con su formación Jeff Massey (cantante y guitarrista), Eric Saylors (guitarrista y coros), Joe Winters (batería) y Joe Bishop (bajista).

Desplegaron su Southern Rock particular, con sus duelos de guitarristas acompañados de una sólida base rítmica. El sonido fue muy bueno y la conjunción del grupo perfecta. A destacar los solos de guitarra de Remember the Taker, Abandoned Ship tocada con Lap Steel guitar y de nuevo un impresionante duelo de guitarras en High and Humble.

Una hora exacta de temas sin apenas parones, con breves agradecimientos y elogios hacia nuestra ciudad y público y demostrando que son muy buenos, de esos que si no sudaran por el calor de los focos, apenas se aprecia la dificultad de lo que hacen. Una guitarra hace solos y la otra hace riffs sin parar y se van alternando sin que apenas te des cuenta. Sin esfuerzos ni florituras pero con una calidad impresionante.

Repertorio: Please the Believer / Turn of the Wheel / Remember the Taker / Shift / Shake your Faith / Broken Spirit Blues / abandon ship / Make it right / High and Humble / Come on Down /  

Y también puntuales aparecieron los Screamin’ Cheetah Wheeles, estaba claro que tocaba velada de grupos con nombres complicados y rimbombantes.

Desde un Azkena hace casi veinte años que no aparecían por los escenarios, y tras su vuelta, si algo dijo tener claro Mike Farris, es que dado el gran número de fans que había en España, este era un sitio al que tenía que volver tras su regreso, agradeciendo a José Luis Carnes (promotor de Mad Note Co.) el haber hecho posible su visita a nuestro país.

La formación, Mike Farris (vocals), Rick White & Bob Watkins (guitars), Steve Burgess (bass), Terry Thomas (drums) también funciona como una maquinaria perfecta. Un tanto más eléctrica y roquera en el directo que en los discos, donde se notan las influencias soul que impronta la voz de Mike.

El camaleónico Mike, es el que hace posible que un tema suene a blues, otro a gospel, otro a soul y otro a hard rock.

El sonido y las luces mejorables. Por momentos las guitarras cuando hacían los solos no se oían igual de bien que cuando acompañaban el tema, la voz alguna vez se perdía y las luces no iluminaban ni al batería ni a Rick White. Esto comparándolo con Steepwater, que sonó tan bien, que hizo que luego se notaran ciertos detalles mejorables. Pero todo esto para el diez, ya que en general estuvo bastante bien.

El día anterior tocaron en Barcelona y por problemas de tiempo no tocaron dos temas, y con uno de ellos empezaron, Boogie King. Para luego tocar durante dos horas y cuarto todos sus éxitos seguidos. Solamente interrumpidos por alguna pequeña charla de Mike agradeciendo la entrega y fidelidad de la gente congregada y para felicitarle y cantarle el cumpleaños feliz con tarta incluida a iniciativa de Rick White.

Como hemos comentado, Mike se mueve en muchos registros, lo cual dejó patente en Leave your Pride, donde desplegó su chorro de voz haciendo las veces de predicador gospel, su lado más íntimo en una entrada en solitario a la guitarra, dándole más aire aún de balada a This is the time, un aire oscuro a More than I can Take, o su lado más roquero en una maravillosa Majestic, que fue la tapada de la noche. Frenético, saltando, moviendo a la gente, animando y sin parar de sonreír se les veía a todos contentos y concentrados en su vuelta. Cada tema parecía que iba a ser el último del concierto y es que solamente ellos saben si van a volver a tocarlos en directo. Al menos en España.

El fin de fiesta con todo el público coreando Ride the Tide fue un colofón más que acertado para una noche de rock and roll de las que me temo ya nos quedan pocas. Los dos bises finales sirvieron para bajar revoluciones, se agradeció, fueron tres horas y cuarto de frenético rock and roll, llenos de grandes solos de guitarra, grandes acompañamientos rítmicos y buen saber hacer en el escenario. No se puede pedir más.

Repertorio: Boogie King / Shaking the blues/ Halcyon days / I dreamed / Leave your Pride / Good Time / More than I can Take / Messenger’s Lament / Gypsy lullaby / Sister Mercy / Let the child ride / Father speaks / Magnolia / This is the time / Majestic / Backwoods Traveling / Ride the Tide/ (bises) One big drop / Venus

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