CRAZY LIXX – Sound of the LIVE minority
Glam con mucha marcha
De todo hay en la viña del Señor, y para bien a veces, como es el caso que nos ocupa. Alejados de un tono solemne, o del ruido porque sí, o de excesos instrumentales que a veces cansan, o también de ejercicios de virtuosismo que adornan a menudo una carencia de fundamento, hay gente como los suecos Crazy Lixx que (precisamente en la cuna del power metal), priman la juerga y la diversión por encima de cualquier consideración, en las antípodas del estilo preeminente en la zona de Escandinavia y el norte de Europa.
Sound of the LIVE minority (seguro que a Rajoy le encantaría este título, defensor él de, ah, la mayoría silenciosa, esa estupidez) es el primer disco en directo del quinteto formado por Danny Rexon (voz), Joél Cirera (batería), Jens Sjöholm (bajo) y Chrisse Olsson y Jens Lundgren (guitarras), quinteto del que sólo los dos primeros quedan de la formación inicial de 2002.
Casi se hace raro escribir sobre una banda con menos de veinte años de trayectoria, y más raro se hace si esta banda se dedica a reflotar un estilo tan familiar al glam rock de final de los setenta: marcha, ritmos rápidos, distorsión bien guarra, ritmos más rápidos, voz chillona y estribillos pegajosos… lo tienen todo: Hell raising woman, Rock and a hard place, 21’ til I die… qué maravilla. Súper recomendable, con una banda que no será excepcional pero que suena exactamente como quiere, y eso es mucho más que muchos. Dan ganas de ir a verlos.