ROYAL BLOOD + BAD BREEDING
Sobreviviendo al Hype
Medio año después de su actuación en el DCODE Fest parece claro que Royal Blood han asentado su posición como una de las bandas más prometedoras salidas del Reino Unido en los últimos años. Si entonces, su disco apenas contaba con un par de semanas en las tiendas, tras medio año, parece claro que no es simplemente un hype de temporada sino que el talento de Mike Kerr (bajo y voz) y de Ben Thatcher (batería) parece dispuesto a demostrar que lo mejor está aún por llegar.
Tras la suspensión de sus fechas en noviembre, las retomaron en recintos más grandes agotando el papel. En Madrid, en víspera de Semana Santa y con un tiempo espectacular, pocos “madrugaron” para ver a los teloneros, sus compatriotas BAD BREEDING. El cuarteto de Stevenage practica un punk británico mezclado con rasgos hardcore, que quizás resultara demasiado árido para buena parte del público, pero me resultaron interesantes. Al menos no dejaron indiferentes. Una propuesta por momentos extrema, en la que la locura de su cantante (lo mismo estaba tirado por el suelo del escenario que paseándose por el foso que les separaba del público) se llevó todo el foco de atención. Apenas tienen un par de singles en el mercado pero habrá que seguirles la pista. Fueron veinticinco minutos de lo más intensos.
Setlist BAD BREEDING: Losing My Head/Falling/No Progress/Separate Me/A Cross/Haemorrhage/Chains/Burn This Flag/Age Of Nothing/Blurring Out.
Conforme se acercaban las diez de la noche, la Riviera se llenó para recibir con sus mejores galas al dúo de Worthing. Y es que desde el primer minuto estuvieron entregados a lo que ROYAL BLOOD les ofreció. El inicio con “Hole”, cara b de su segundo single, ya mostró las cartas que iban a jugar durante su hora de actuación. El magnífico sonido que le saca Mike Kerr a sus bajos y su pedalera de distorsiones, con las que parece que oigamos guitarras cuando no las hay, y la precisa pegada (ni demasiado acelerada, ni demasiado pesada) de Ben Thatcher.
Con un disco que no sobrepasa la media hora con sus diez canciones y apenas cuatro caras b en su haber pocas sorpresas podíamos esperar. Y no las hubo. Tocaron todo el disco y un par de esas canciones extra, “One Trick Pony” fue la otra además de la citada “Hole”. Las influencias de Jack White, Queens Of The Stone Age e incluso Muse planearon por la sala en todo momento, pero no pareció que estuviéramos viendo a simples imitadores, sino a músicos con personalidad propia. Quizás lo que más chirriara fueran los largos parones en varios momentos de la actuación que rompieron la intensidad. Hubiera quedado mejor que hubieran tocado cuarenta y cinco minutos del tirón y no dejar la sensación de alargar por alargar. Pero en lo musical, que es lo importante, resultaron intachables. Y el público lo disfrutó de lo lindo con los temas más conocidos (y destacados): “Come On Over”, “Figure It Out”, “Little Monster” y “Out Of The Black”, tema que cerró su actuación.
Se les espera con un segundo disco bajo el brazo, momento en el que habrá que exigirles más en cuanto a repertorio, manteniendo la misma intensidad que se gastan hasta la fecha. La gira en la que van a abrir para Foo Fighters en Europa y USA debe ser su trampolín para saltar de categoría. Esperemos que lo aprovechen.
Setlist ROYAL BLOOD: Hole/Come On Over/You Can Be So Cruel/Figure It Out/Better Strangers/Little Monster/Blood Hands/One Trick Pony/Careless/Ten Tonne Skeleton/Loose Change/Out of the Black.