CRIMSON REIGN – The calling
Hard rock de corte priestiano
Phoenix, Arizona, es la patria chica de la banda Crimson Reign, con años de trayectoria local, que ahora se decide a publicar este álbum, el primero que sacan, con el que presentan su producto de hard rock no muy duro, más parecido a Judas Priest que otra cosa, sobre todo por la voz de Tony Giedraitist, que en el momento de escribir esta reseña ya no forma parte de la formación de la banda. De hecho, buscan vocalista anunciándose en la web.
Los Titus Medina (guitarra y alma mater de la banda), Darren Tuchawena (bajo) y Daniel Beck (batería) hacen un interesante hard rock para el que, por cierto, quizás iría mejor otro tipo de voz:a ver si va a ser por eso que han largado a Giedraitist…
El disco va de menos a más, explorando todos los tópicos, por cierto, lo cual no acaba de ser una virtud. Partiendo de The calling, extraño tema que tiene un estribillo espantoso, mejora un poquito, sin matar, con Man within y Signs of the times, pero entonces llega la baladita insulsa, Tests of faith.
A partir de aquí, la cosa mejora, aunque abusen de los principios a medio tiempo tan típicos y tópicos de los ochenta: Poverty, Betrayel (muy en plan Judas Priest), Zaricco, Mr. Incarcerated (que tiene un atractivo solo), y los temas que cierran el álbum, que parecen directamente versiones de Judas Priest: Child abuse y Clairvoyant, excelentes, por cierto, como la portada, que es un dibujo alucinante.