ALBERT PLÁ

Poco se puede decir de Albert Plá que no se haya dicho. Me centraré en comentar pues su actual espectáculo en su primera visita a Madrid, tras el fallido intento de presentar el anterior debido a una enfermedad coronaria.

Acompañado de un habitual de Plá como es Diego Cortés, que no le abandonó ni en su etapa de Superhéroe con La Pandilla Voladora y con un escenario compuesto exclusivamente por una butaca, Albert Plá repasa lo más brillante y reconocido de su larga carrera musical cantando en castellano.

Siempre he creído que a Albert hay que verle en directo. Es todo un actor, un gran monologuista, en realidad creo que esa es su verdadera profesión o lo que le gusta hacer más. No hay ni un minuto en el que no esté poniendo gestos o dirigiéndose al público. Incluso los temas tocados simplemente con su guitarra personalizada y en este caso acompañado por las florituras flamencas que aporta el saber hacer de Diego, ganan más y resultan mejores que las grabaciones, a pesar de tener menos instrumentos.

Comenzó con la relativamente nueva canción de Bombas sobre Madrid, muy apropiada, ahora más que nunca. Entre cantada y recitada, como hizo con casi todo el resto del repertorio. El público llenaba la sala y estaba predispuesto pero con este primer tema ya se lo ganó. Continuó con Corazón y La diferencia para dar paso al primer gran tema de la noche, la magistral historia del Gallo Eduardo, algo más corta que la versión de Veintegenarios pero siempre genial. Las peripecias de Teófilo Garrido, muchísimo mejor que su versión grabada y la fabricación del Molotov azul. Tres grandes temas seguidos y con letras “sabrosas”, bueno, como todas.

Albert hace mutis por el foro para dejar a Diego explayarse. Se marcó un solo de los habituales donde combina toques flamencos, recuerdos a Paco de Lucía, percusión con la caja de la guitarra, sonidos raperos con la boca y un manejo de la mano derecha abrumador. De pie y sentado. Todo un crack.

Vuelta al escenario para tocar esa ranchera llena de amor y odio que es Yo quiero que tú sufras y dar paso al segundo tema estrella de la noche, La Colilla, magistralmente interpretada, a la que añade “efectos especiales” de humo para ambientar la que se monta en los U.S.A. por una “insignificante” colilla. Para interpretar Ciego, por supuesto, se apagaron las luces y Albert bajó a cantar entre el público acompañado de su casco con frontales que ya utilizó en el espectáculo que presentó con el disco La Diferencia. A continuación su “polémico” monólogo de Manifestación con todo aquello de Me gustaría…que tantos enlaces ha generado en internet y terminar con uno de sus temas más conocidos Joaquín el Necio, cantada por todos los allí presentes.

Rápida visita a camerinos para rematar con El bar de la esquina, la tercera canción magistral de la noche, Ojos, y la archiconocida El lado más bestia de la vida. Despedida y fin.

Bueno, para que nadie se fuera con una impresión equivocada y rumbera, Albert se arrancó a capela y acompañado por la parte más “bestia” del público con su tema más oscuro y macabro, y quizás uno de los más oscuros y macabros que conozco, El sol del verano, sí, esa de los hermanos gemelos que tenían alguna que otra diferencia.

Un repaso por lo más selecto de la factoría Plá, mucho mejor en directo, ganan muchísimo los temas con la interpretación y la puesta en escena. Diego aporta un toque flamenco y de calidad a la guitarra y Albert en su línea, con su forma de cantar e interpretar.

En Noviembre repite en la misma sala, así que el que quiera ya sabe.

Listado de canciones: Están cayendo bombas en Madrid / Corazón / La diferencia / El gallo Eduardo Montenegro / Teófilo Garrido / Bomba / (Solo de Diego Cortés) / Yo quiero que tú sufras como yo / La Colilla / Ciego / Manifestación / Joaquín El Necio / (Bis) El Bar de la esquina / Ojos / El lado más bestia de la vida / El sol del verano