HIAGEN – Los últimos días de Pompeya

La banda madrileña Hiagen nos presenta su segundo trabajo, meritorio intento de hacerse un hueco en la escena del metal progresivo con un estilo un tanto difícil de clasificar. Si bien podríamos decir que se trata de eso, metal progresivo, lo cierto es que se observa un esfuerzo continuo por alejarse del sonido más heavy, primando largos pasajes instrumentales en medio tiempo, acústicos incluso, además de ser remarcable el hecho de que la voz es muy clara, melodiosa y poco metalera, semejante al uso de la misma que hacen bandas como Sober.

En general, lo que nos vamos a encontrar son todo tipo de ritmos variados con fabulosas líneas de bajo sobre las que vuelan interesantes evoluciones de las guitarras, plagadas de efectos, todo ello relleno con teclados que completan el ambiente que quieren recrear, con temas que van desde los dos minutos escasos hasta los diez: rock progresivo de manual.

El álbum se puede descargar, además de comprarlo baratito, en la web de la banda, y consta de una intro más nueve temas dedicados a describir la destrucción de Pompeya (¿según Bulwer Lytton?), en los que este sexteto madrileño tiene momentos brillantes. Como ya se ha dicho antes, la batería de David Fernández Darwin y el bajo de Rodrigo Téllez son buenísimos, y los teclados de Silvia Fernández Cociña y las guitarras de Moisés Martín, Carlos Ramírez y Edgar Soberón están a la altura. Este último es también la voz del grupo, que da el contrapunto de suavidad al estilo de la banda. A destacar los primeros temas del paquete, como Déjalo estar, Por mucho que te empeñes o Pompeya, y sobre todo los últimos, con las perlas El punto de no retorno, El Amo sí que sabe castigar y Luce la mañana después de la catástrofe.

Es un disco muy interesante de rock progresivo, que va de menos a más.