MONSTER MAGNET
Dave Wyndorf ha vuelto
Reconozco que me había olvidado de Dave Wyndorf y los suyos. Me perdí sus últimas dos visitas a la misma sala de la capital en 2008 y 2010 presentando sus dos anteriores referencias discográficas. Mal hecho por mi parte. Renegar de Wyndorf y sus Monster Magnet es un pecado capital para un buen rockero. En mi descarga queda que si les vi en el Graspop 2009, pero de eso casi hace un lustro. Tampoco le hice mucho caso ni a ‘4-Way Diablo’ ni a ‘Mastermind’ en su momento, pero si que me había empapado de su reciente ‘Last Patrol’ casi como no hacía desde la época dorada de finales del siglo pasado con los inmortales ‘Dopes to Infinity’ y ‘Powertrip’. No lo hubiera creído posible siendo el primero en el que se nota la ausencia del gran Ed Mundell, pero aún y con esas tenía ganas de volver a verles en directo.
Una pena que un robo del backline hiciera imposible la actuación de los teloneros previstos, Steak, pero eso hizo que la sala Arena se llenara casi en el último momento (cerca de seiscientas personas) para ver la descarga rockera que se nos avecinaba.
Había gente a la que le pilló de sorpresa, pero quienes habíamos curioseado por internet sabíamos que los norteamericanos nos iban a obsequiar con la interpretación íntegra de ‘Last Patrol’, una muestra más de lo convencidos y contentos que han quedado del resultado de su noveno disco de estudio. Para un servidor, casi inmejorable decisión. Durante una hora y apoyado en las proyecciones psicodélicas que se lanzaban desde los equipos de la mesa de sonido, recorrieron de arriba abajo un disco impecable. Desde el primer minuto se vio que el estado de forma de Dave era impecable. Ni tan delgado como antes de la sobredosis que casi se lo lleva por delante, ni con el tamaño “king size” que le recordaba en nuestro último encuentro. Y ahora es aún más dueño absoluto de la escena. Su banda le cede el total protagonismo y sólo el sonido mejorable de la sala hizo que ellos no lucieran como su jefe.
Muy grandes “Last Patrol” y “End of Time”, en las que dio rabia que no se alargaran aún más en los largos desarrollos repetitivos marca de la casa. El parón al acabar el disco fue de cumplir el expediente porque nos habían dejado en los más alto con “Stay Tuned”, y como cabía esperar rebuscaron en el pasado para dejarnos cuatro perlas repartidas en media hora que no tuvieron discusión. Siempre podemos discutir si no tienen suficiente material para acercarse a las dos horas de actuación, pero sabiendo cuales son las costumbres, el remate que supuso “Space Lord” hizo que nos olvidáramos de todo y que aquellos que hemos osado en algún momento darles por muertos borráramos dichos pensamientos impuros de nuestra cabeza. Un genio auténtico de los que quedan pocos en el panorama actual. Chapeau.
Setlist: I Live Behind the Clouds/Last Patrol/Three Kingfishers/Paradise/Hallelujah/Mindless Ones/The Duke of Supernature/End of Time/Stay Tuned//(bis) Twin Earth/Look to Your Orb for the Warning/Dopes to Infinity/Space Lord