THE WATERBOYS

Últimamente la memoria me juega malas pasadas y creía haber visto a THE WATERBOYS en alguna otra ocasión en sala, pero tras mucho indagar, me parece que su formato trío en un lejano Azkena Rock Festival 2006, fue mi única cita con ellos. En los últimos años se me escaparon tanto su gira de 2007 tras la edición de ‘Book Of Lightning’ como la realizada en abril del año pasado para presentar su último disco, ‘An Appointment with Mr. Yeats’. Por tanto, no había excusa para perderme esta gira, titulada “Fisherman’s Blues Revisited”, en la que Mike Scott se reencuentra con sus viejos amigos de correrías a finales de los ochenta, Steve Wickham (viola), Anto Thistlethwaite (saxo) y Trevor Hutchinson (bajo) que junto al batería Ralph Salmins conforman la formación en esta gira que busca capturar el espíritu del que para muchos es el mejor disco de la banda, ‘Fisherman’s Blues’.

Se había anunciado puntualidad en el arranque de la actuación, pero hubo que esperar un cuarto de hora más sobre la hora prevista, posiblemente porque mucha gente aún se encontraba fuera de la sala, ya que se apuró hasta el último instante para entrar. De hecho, a las nueve parecía que no iba a haber una buena entrada y para cuando Mike Scott apareció inicialmente en solitario por el escenario, aquello estaba prácticamente lleno con un público eminentemente adulto.

Detrás de Scott, que arrancó con “Strange Boat”, se fueron uniendo sus compañeros para acabar el tema ya como una banda completa. Siguiendo la idea de la gira, esto no era una interpretación de cabo a rabo del disco, sino un retorno a aquella época, incluso presentando grabaciones de entonces que han recopilado en la mastodóntica caja ‘Fisherman’s Blues Box’ con 7 Cd’s, que se vendía en el puesto de merchandising al precio de 70€. Por eso tras recuperar ‘Higherbound’, se atrevieron con el “A Girl Called Johnny” de su homónimo disco de debut para sorpresa de los que se esperaban otro tipo de concierto.

El sonido fue perfecto en todo momento y los músicos consiguieron llevarnos al ambiente tabernario que todos nos imaginamos cuando escuchamos el disco. Incluso el público “contribuyó” lo suyo, saltándose completamente la prohibición de fumar en la sala, como si viviéramos en la época del disco. Pero dejando estas consideraciones de lado, las dos horas de actuación fueron pletóricas. Recuperaron versiones de Bob Dylan (“Girl From The North Country”), Hank Williams (“I’m So Lonesome I Could Cry”) y Van Morrison (“Sweet Thing”) además de alguna que otra tradicional (“The Raggle Taggle Gypsy”). Especialmente graciosa resultó la improvisación de la canción infantil “The More We Get Together” para camuflar un arranque en falso de “When Will We Be Married?”.

La gloriosa “Fisherman’s Blues” cerró la primera parte del concierto con todo el mundo entregado en un frenesí celta casi sin límites. Ya en los bises la inevitable “The Whole Of The Moon” produjo una nueva catarsis general. De hecho, el propio grupo cambió de idea de cierre de la inicialmente prevista “Saints and Angels” a la contundente “Be My Enemy”. Y así, tras dos horas exactas, se puso punto final a un viaje nostálgico al pasado glorioso, pero que nos muestran a un grupo en estado de gracia que puede mirar al futuro sin ningún miedo de quedar en el olvido. Así además, dejo saldada una deuda pendiente con uno de los grupos clave de la década de los años ochenta.

Setlist: Strange Boat/Higherbound/A Girl Called Johnny/Girl from the North Country (Bob Dylan cover)/Stranger to Me/When Ye Go Away/Tenderfootin’/The More We Get Together (Traditional cover)/When Will We Be Married?/Ain’t Leavin, I’m Gone/The Raggle Taggle Gypsy (Traditional cover)/We Will Not Be Lovers/I’m So Lonesome I Could Cry (Hank Williams cover)/Blues for Your Baby/Don’t Bang the Drum/Sweet Thing (Van Morrison cover)/Fisherman’s Blues//(bis) Dunford’s Fancy/The Whole of the Moon/On My Way to Heaven/Be My Enemy