DOBLE ESFERA – Mi universo
Variado disco de Rock y Heavy Metal
Los murcianos Doble Esfera, formados en 2010, nos muestran su primer álbum titulado Mi universo, grabado, mezclado y masterizado en los estudios La sala de máquinas de Lorca por Manuel Torroglosa en 2012. De primeras nos topamos con un formato visualmente muy atractivo, con una portada elaborada, realizada por Fernando Navarro (Nanderas_HM), que plasma a la perfección la esencia de la banda y te invita a dedicarle unos mitutos para observarla. Abriendo el libreto nos encontramos con una estructura bastante sencilla pero eficaz: información del disco, agradecimientos, letras y foto de la banda, salvo por un detalle, todas las letras están curiosamente dedicadas en relación con lo que hablan, algo que le da ese distintivo y ayuda sin duda a comprender un poco más de qué trata cada canción.
Ya metidos en materia, nos abren sus puertas con un primer tema, La esfera, que nos deja ver lo que podemos descubrir en este recorrido, en líneas de Heavy Rock clásico, con una instrumental bien pensada y elaborada, y una voz suave y muy melódica que marcará la tónica de lo que nos iremos encontrando, y que empieza con una solitaria guitarra seguida de la buena batería de Willy Medina para dar paso al resto de sus compañeros. Pero es la segunda pista, El exterminador la que realmente termina por engancharte, con ritmos más pesados que se entrelazan con partes más melódicas en la que ya el bajista Pedro «Loko» Martinez saca a relucir sus virtudes a las cuatro cuerdas, y una linea vocal muy pegadiza.
Llegados a la tercera pista, Mi universo, se puede apreciar cómo va subiendo la caña con unas guitarras mas rápidas para luego bajar la intensidad, dejando patente la marca de la banda: empezar fuerte las canciones, rebajar el ritmo con las melodías vocales que suavizan cada tema y volver a meter chicha en las partes intrumentales. Destacar en esta canción su gran final, pues podemos escuchar cómo la voz de dos muy jovencitas amantes de la música, Nora y Lara gritan a todo pulmon ¡¡ROCK & ROLL Y HEAVY METAL!!, Sinceramente, es un detalle que me ha encantado.
El ángel del hogar, en una línea más heavy, alterna ritmos rápidos y lentos. Remarcar en esta canción el solo de Antonio Elzaurdia.
En Perdido en el tiempo nos sorprenden cambiando la forma de llevar las canciones, pues empieza bastante suave, a modo de balada, para después meter detalles a lo largo del tema con aires más Metal, pero llevando esa tesitura lenta que la convierte en una canción con mucho sentimiento, en la que el vocalista Eladio Ruipérez comparte su labor con Ana Gil, quien colabora haciendo las segundas voces. Sin darte cuenta llega Huracán, pues el comienzo de esta enlaza a la perfección con la anterior. Desconozco si estarán ordenadas así a proposito, pero sin duda es un orden muy acertado, un tema con mucha calma, aunque a modo personal, la mas instrascendente del disco.
Con El resplandor volvemos a recuperar ritmos más movidos, con un gran comienzo que recuerda mucho a los grandísimos Black Sabath, he de decir que me esperaba más al oír empezar esta canción: después de dos temas bastante suaves mi cuerpo me pide algo de caña, pero esto es únicamente una opinión personal de alguien a quien le gusta la música un poco más movida. A pesar de ello, no es para nada una mala canción, pues se puede apreciar, al igual que en el resto del disco, una gran calidad compositiva, recordándonos de nuevo en su final a esa mítica banda.
Espejismo con un estilo más Metal moderno (la guitarra en algún momento puede llegar a recordar timidamente a sonidos panterianos), Ana Gil vuelve a prestarse para apoyar en algunos momentos a la voz principal, hay algo que me llama mucho la atención de este tema en particular y es la gran variedad de estilos que se pueden apreciar, también en el resto de canciones, pero en esta más que en las demás.
Doble o nada nos llevan por una senda de Hard Rock, pero incluso teniendo guiños a Power Metal y Heavy Metal que saben enlazar muy bien. Nos encontramos La noche, un estracto acústico de guitarra y una batería muy escasa de apenas un minuto de duración, para trasladarnos de seguido a Dulce perdición, con la colaboración en piano y teclados de Gallego Rivas, tema que nos ofrece la banda para cerrar el disco, con aires de Jazz y Bosa Nova, pero sin perder la marca Heavy Rock de la banda, una auténtica maravilla a mi parecer, gran sorpresa cuando sin esperártelo te encuentras con una pista tan diferente a las demás pero que para nada desencaja, marcando su esencia de forma magistral.
En conclusión, un disco en el que nos podemos encontrar una gran variedad de estilos a lo largo de las once pistas. Gran calidad compositiva que juntado al buen trabajo de producción lo convierten en un disco muy recomendable, aunque puede que flojee un poco en su ecuador bajando la intensidad del conjunto, no se puede negar la gran calidad que atesoran, ofreciendo una gran variedad, habrá que tenerles muy en cuenta para sus siguiente trabajos.