MIGUEL RIOS
Un mito se nos va
Pocos artistas nacionales e internacionales, son capaces de llenar el Palacio de Los Deportes de Madrid dos noches seguidas, MIGUEL RIOS lo consiguio, y de que manera. Raro es acudir a un concierto en el que la media de edad supere la mia, esta vez estaba mas cerca de la del propio cantante, y es que sus seguidores son legion y fieles. Acostumbrado a cubrir conciertos en el Palacio, lo primero que me llamo la atencion al entrar fue el pedazo de escenario que le habian montado al granaino. Hay grupazos que no llevan ni la mitad de montaje que llevaba MIGUEL RIOS. Impresionante la cantidad de personas y material que esta moviendo el cantante con su gira de despedida. Todos sabiamos a lo que ibamos, a ver a MIGUEL RIOS cantando los temas que a todos nos gustan, y otros que andaban olvidados y que por carino los recupero para la ocasion. Por si fuera poco contaria con acompanantes de lujo en algunos de sus temas. Y esto fue lo que acontecio. Pero no solo se quedo en esto. El publico de Madrid siempre ha tenido un feeling especial con MIGUEL RIOS, y estas dos noches se lo demostro. Seguro que alguna lagrimilla se le salto al viejo rockero ante las continuas muestras de carino a modo de ovaciones por parte de los asistentes. Y es que MIGUEL RIOS a sus 66 anitos sigue mostrando una puesta en escena espectacular, y lo mas importante, una voz que mas quisiera mas de un principiante. Artificio, luces, pantallas, y por si fuera poco los musicos que le acompanan son de diez. Poco se puede decir del concierto si no se quiere caer en el pelotismo, eso si, vivimos momentos predecibles pero inolvidables, como cuando interpreto El rio con Ana Belen amiga suya de toda la vida, cuando subio uno de los mejores guitarristas nacionales como Jorge Salan, o Chechu de Los Madison grupazo que recomendamos sin ningun genero de duda desde SOLO-ROCK para El blues del autobus, y la version con Amaral de Al sur de Granada. Desde luego me quedo cuando salio su hija Lua ahora dentro del grupo Gold Lake, y el momentazo guitarrero con el querido Ariel Rot en Sabado en la noche. Pero si hay que elegir tres momentos en el concierto, uno es cuando Rosendo y MIGUEL RIOS tocaron el Maneras de vivir de los Leno. Otro la version rockera que se marco del Mueve tus caderas de los castizos y admirados Burning, y el ultimo, no podia ser de otra manera, la despedida de Madrid con el Himno de la alegria. Por mucho que quieras nunca te iras