CENTINELA NOCTURNIA

Atractivo cartel, pero que no consiguio ni medio llenar la sala Heineken. Estamos con lo de siempre. Se juntaron varios conciertos en Madrid, pero el panorama esta un tanto extrano y parece que cuidamos poco de nuestro Metal nacional, a pesar del nivel de las bandas que tenemos, que esta a la altura de cualquier grupo de fuera. En fin. Ante apenas unas decenas de espectadores, salieron al escenario los toledanos Nocturnia, que traian bajo el brazo su tercer trabajo discografico Dias de ceniza. El publico empezo un poco frio, salvo algunos incondicionales de la banda, pero enseguida Nocturnia, supieron animar a los presentes con su buen Heavy Metal, elaborado y de calidad. Cesar estuvo muy comunicativo y muy gracioso, arrancandonos varios sonrisas, cada vez que nos alentaba con acento rural. Ademas estuvo de sobresaliente a la voz, a pesar de que nos pidio disculpas, porque hace un par de meses que tiene dos cuerdas vocales perjudicadas ye habian recomendado reposo. Si con las cuerdas vocales canta como lo hizo ayer, cuando este en condiciones normales sera un torrente espectacular. Salva y Roberto estuvieron muy bien a las guitarras, pero fue Cesar Arroyo al bajo, el que mas me gusto, al ser el mas activo de la banda junto con su cantante. Y Jose Maria estuvo muy potente a la bateria, a pesar del escaso espacio que le habian dejado sobre el escenario, quedando relegado al lado izquierdo del mismo y casi ni se le veia. Pero estuvo francamente bien. Si habia teclista en este concierto, yo no lo vi sobre las tablas. Pero si que sonaron teclados creo que grabados, quiza demasiado altos de volumen, ahogando las guitarras en algun momento puntual. Nocturnia tocaron apenas siete temas y me dejaron con ganas de mas, porque es una banda que creo que ya se merecen por meritos propios, tocar de cabecera de cartel. A ver si pronto podemos verles dar su concierto completo en Madrid, porque creo que se lo merecen. Set-list. Dias de ceniza De sol a sol Llantos de fuego Sed de ambicion Espejismos En busca del tiempo El silencio Centinela no tardaron mucho en aparecer y ya la sala tenia algo mas de gente, aunque no llegabamos ni a doscientas personas seguramente. Arrancaron muy caneros y mantuvieron ese potencial durante toda su actuacion. Aunque para mi particularmente, se notaba mucha diferencia cada vez que sonaban canciones de sus primeros discos, que a mi me gustan mucho mas que los nuevos. Las canciones suenan completamente distintas y el grupo se ha encauzado hacia otros sonidos y estructuras distintas. Pero todos disfrutamos del buen hacer de Centinela que sonaron muy limpios y con un sonido muy bueno. Las guitarras de Fernando Moya y Juan Parreno muy pesadas y melodicas cuando los temas lo requerian. El bajo de Javier Simarro con muchos detalles de muy buen gusto y la bateria de Miguel A. Moreno atronadora y contundente. Y por encima de todo, la espectacular voz de Jose Cano, que llenaba todos los rincones de la sala. Si hubiese que poner algunas pegas al concierto, serian la falta de continuidad entre tema y tema, que a veces deberia haber sido mas fluida y quiza que al guitarra solista Fernando le hubiese faltado algo mas de garra y de filling, porque a pesar de que cumplio a la perfeccion su cometido realizando buenos solos, parece que le falto algo mas de carisma. Pero musicalmente el grupo estuvo muy bien. En la sala habia fans incondicionales de la banda que incluso habian venido desde La Gineta, que no pararon de cantar y de hacer guinos y peticiones al grupo. Jose fue sin duda el que mas destaco con su potencial vocal que no deja de asombrar. Los vocalistas de ambos grupos, lanzaron sendos mensajes a los productores, medios y demas, pidiendo mas apoyo al Metal nacional y a los grupos espanoles que demuestran cada dia, que calidad tienen de sobra, aunque ultimamente les falta un empujon para seguir luchando en un mercado con muchos altibajos. Set-list. Mas fuertes La sentencia Escribire Panico Hablo de vivir Rencor Mirame Frio El sabio Sientelo Dulce compasion Como un huracan Sin control El desterrado La herida Nueva vida