LA MÁQUINA – ELEPHANT STONE
Una promesa para el rock nacional
Si hace poco tiempo resenabamos el buen primer trabajo de esta banda madrilena, no queriamos dejar pasar la oportunidad de estar en la presentacion del disco, asi que nos fuimos a La Sala para ver lo que daban de si en directo. En principio, nos sorprendio que hubiera bastante publico, cuando, segun estan las cosas, a este tipo de eventos lo normal es que asistan los amigos y poco mas. A eso de las nueve de la noche hacian su entrada otro grupo madrileno, ELEPHANT STONE, que fueron la segunda sorpresa de la noche. Con un rock de influencias Southern y bluessys, resultaron muy entretenidos. Un cantante con muchisima gracia, que incluso se atrevio a realizar un simulacro de streeptease que terminaria con la puesta de una camiseta de JOHNNY CASH, hizo las delicias de un respetable que iba poco a poco llenando hasta los tres cuartos la sala. Realmente una banda para seguir, que andan ya detras de la grabacion de su primer trabajo. Una hora despues, aproximadamente, salian a escena LA MaQUINA y empezaban a desgranar un concierto que tuvo dos partes diferenciadas. En la primera notamos que el grupo estaba despegando a gran nivel, con la interpretacion de sus temas ,bastantes de los cuales son de muy buena calidad y algun cover que daba ambiente Los rokeros no son buenos, de BARoN ROJO. Actitud rockera cien por cien y el caracteristico sonido inmaculado de La Sala Live, ponian ante el publico una propuesta arrolladora. A esto se unia que el publico, como debe ser en estos casos, estaba por la labor y que los componentes del grupo se encontraban muy a gusto. El cantante, Sito abalos, es un frontman excesivo, con una potente voz que ataca diferentes registros hardrockeros y que alcanza una locuacidad que a veces resulta hiperbolica, manteniendo una relacion con el publico constante, Joe Martillo, pura imagen y actitud, golpeaba sin piedad su bajo, sonando potente al tiempo que en ese segundo plano que se exige a las secciones ritmicas. Pero por encima de todos, y por eso dedicamos un punto y aparte, la guitarra solista de Dema estaba a un nivel espectacular. Con una tecnica bastante correcta y, sobre todo, sacando a su guitarra sonidos calidos, de los que hablan y no chillan, mantuvo al grupo dentro de los canones de rock. Un recital, realmente. El caso es que todo iba bien, pero los grupos que empiezan tienen estas cosas y pasada una hora y cuarto, aproximadamente, tras uno de los momentos mas brillantes de la noche, con la balada 50 segundos en la que colaboro Bianka, una amiga del grupo con una preciosa voz, llego el turno a la segunda parte del concierto. Quiza por el exceso de versiones, quiza por ser un concierto demasiado largo y emocional el bateria fue reduciendo su pegada de manera ostensible, el caso es que hubo un bajon de nivel, al que no ayudaron los excesos de Sito, incluido un intento de homenaje a Antonio Vega, que estaba claramente fuera de lugar con todo el respeto hacia el artista pop. Asi, la ultima media hora se hizo prescindible, aunque no logro del todo eclipsar que hasta ese momento habiamos visto nacer una buena promesa del rock nacional, que lo habiamos pasado muy bien y que buena parte de los temas propios de la banda tienen una indudable calidad, en los que creo que deben insistir a la hora de confeccionar su set list. Como conclusion, pese a los previsibles altibajos de un grupo que esta empezando realmente a rodar en serio, podemos decir que merecio la pena pasarse por La Sala y que recomendamos ir a verlos a su siguiente concierto. Iran para arriba, seguro.