SECRET CHIEFS 3 – PSICOTROPIA

Uno no deja de sorprenderse con el buen momento que vive la musica en vivo en la capital. Con una propuesta de muy dificil enganche entre neofitos y con un precio que descartaba precisamente a indecisos o amigos de no es que quince euros en anticipada sea caro, sino que promueve a que vayan solo los convencidos, no aquellos que por menos de diez euros, se dejarian seducir por algun companero insistente y siendo un lunes de final de mes, todo apuntaba a que apenas unas cincuenta personas se juntarian para ver el debut en Madrid de Secret Chiefs 3, proyecto de Trey Spruance Faith No More, Mr. Bungle, en el que la experimentacion y la psicodelia, mezcladas con sus dosis de musica oriental e incluso musica surf, hacen que sus conciertos sean toda una experiencia. Abrieron la velada el trio madrileno PSICOTROPIA, que encajaban a la perfeccion con la propuesta principal y que arropados por una buena legion de amigos-seguidores, caldearon el ambiente mientras se llenaba la sala. Cerca de cuarenta minutos que muestran que es posible hacer buena musica sin cenirse a la ortodoxia. Por lo que respecta a SECRET CHIEFS 3, se puede decir, que llegaron, vieron y vencieron. El variable combo, se presentaba en forma de sexteto, capitaneado por el mencionado Spruance, pero bien secundado por un potente bateria Peijman Kouretchian, otro par de guitarristas que alternaban otros instrumentos como el violin o el sarangi, un bajista y un teclista, todos uniformados con tunicas que les asemejaban a monjes. El caso es que en varios momentos de la actuacion, sobre todo en los temas con mas largos desarrollos, su musica promueve la introspeccion, algo que se acentua en sus temas de caracter mas oriental, pero supieron conjugar los temas mas cortos y caneros con los pasajes mas largos y pausados. El grupo se encontro a gusto con un publico que respondio a la perfeccion, tanto que parecia que no se quisieran despedir nunca, con dos regresos tras clamorosas peticiones que alargaron la actuacion cerca de las dos horas. Reconozco que el cansancio me pudo cuando vi que regresaban por segunda vez, pero con el tema de surf brutal que nos ofrecieron, vencieron incluso a las leyes de la fisica que en condiciones normales hubieran hecho que abandonara antes la sala. Merito del grupo.