THE MAGNETIC FIELDS
No solo presentaron su ultimo trabajo Distortion
Tiene cosas Stephin Merritt de geniecillo iluminado, un cierto aire distante, una pose un poco autista, un halo de cinismo, pero tambien tiene una capacidad para construir canciones con muy pocas comparaciones. Cambio de sala casi de ultima hora, entorno atipico, un teatro, para la gira de presentacion del festival veraniego Summercase, y concierto casi de camara para, teoricamente, presentar las canciones de su ultimo disco Distortion, influido segun revelo el Sr. Merritt por la escucha del Psychocandy de Jesus and Mary Chain. Todo conformaba una aparente gran paradoja. No son The Magnetic Fields un grupo que se prodigue mucho en los escenarios por lo que sus fans no perdieron la oportunidad de disfrutar de su musica en esta extensa gira europea. Sobre el amplio escenario se dispusieron Stephin Merritt tocando el Buzuki o bouzouki o como demonios se llame a esa especie de mandolina de mastil largo, Sam Davol al cello, John Woo a la guitarra acustica, Claudia Gonson al piano y la voz y Shirley Simms a las voces y coros. Todos ellos sentaditos. Desde un principio dejaron claro que si bien venian a presentar los temas de Distortion, la cosa no iba a quedarse ahi. Hubo un amplio repaso a viejas canciones y salieron al aire canciones de otros de sus proyectos Future Bible Heroes y Gothic Archies todos con esta envoltura clasicista, desenchufada y fragil. Demostro que esas otras caras musicales de Merritt tienen formas diversas pero espiritus comunes. El recorrido por Distortion fue detallado, uno de los primeros temas interpretados fue precisamente el dedicado a sus odiadas California girls, posteriormente pudimos escuchar The nuns litany, Zombie boy, Too drunk to dream, Drive on, driver o el juguete semi-instrumental con que se abre el disco, la oda al sexo en grupo Three way. El formato empleado, alejado de la electricidad de la grabacion, resalta la estructura de la cancion sea esto lo que sea y las asemeja mas a trabajos anteriores. Las canciones de Merritt son buenas, emotivas incluso, pero muy distintas entre si no es que lo sean, ni falta que les hace, aun con ello desde que con 69 Love songs los indies lo asumieron como suyo y le dieron su cuota de exito, sus discos habian marcado un cierto declive y repeticion ya perdonaran del que claramente se salvaba esa maravilla que hizo como los Gothic Archies llamada The Tragic Treasury. Alli, para el que no lo sepa, se recogia su interpretacion sonora de las historias de Lemony Snicket ademas de un par de temas nuevos. Precisamente pudimos oir algunos de esos temas como Crows o Walking my gargoyle dedicada al parecer a su perro de enormes orejas. En mitad de la actuacion una arana subio al escenario preludiando los fenomenos que iban a suceder despues de la enorme pausa que el grupo hizo tras Papa was a rodeo. Como acompanando la velada y para empeorar un sonido en la sala que podria haber sido algo mejor ese zumbido eterno en los altavoces la tormenta aparecio sobre nuestras cabezas justo tras disfrutar de su rescate de Take ecstasy with me y The book of love. Como ven, disfrutamos de un repertorio variado, con tiempo para esas 69 canciones de amor que supusieron una inflexion pero rescatando tambien buena cantidad de su anterior disco, I, como I dont believe you o I looked all over town y tambien de algunos temas de sus operetas y bandas sonoras como Dreams anymore o This little ukulele. A pesar de aranas, lluvias apocalipticas, alarmas inoportunas y sonoras espitas de gas, un curriculo como el que Mr. Merritt tiene y unos musicos y voces como los que le acompanan de una calidad primorosa permitieron hacer que la velada fuera gozosa y disfrutada. Pero eso a Stephin le da igual, con un vaso de vino en una mano y la otra en su orejilla abandono el escenario inmutable y ajeno a los aplausos. Auteur auteur.